En el entorno del diseño, la fabricación, el ensamble o la reparación de circuitos electrónicos se manipulan tarjetas y componentes que son dispositivos sensibles al daño electrostático (ESDS).
Es de común cumplimiento el uso de la norma UNE 61340-5-1 que nos habla sobre la protección de componentes electrónicos frente al fenómeno electrostático.
Para minimizar el daño electrostático se trabaja en una zona protegida ESD donde entorno, materiales y personas se adecuan de tal manera que aseguramos el control de las cargas hasta 100V.
La amplitud de la zona protegida o zona EPA dependerá del trabajo a realizar y su magnitud y así podemos tener una zona protegida a nivel de puesto de trabajo, a nivel zona o a nivel de un área completa.
Aparece la figura del coordinador ESD que es el responsable de velar por el mantenimiento de dicha zona y en último caso el responsable de que se cumpla con lo establecido en la norma UNE 61340-5-1/2.
Lo ideal es que cuando se disponga de una zona EPA madura se trabaje en base a un manual ESD de procedimiento interno y que está basado en la norma UNE de tal manera que le sea más fácil al coordinador el asegurar el cumplimiento de dicha norma.
El coordinador velara por el cumplimiento de la norma general o del procedimiento interno ESD revisándolo periódicamente a través de un plan de auditorias como se indica en la norma en sus apartados 9.6, 9.7 y 9.8.
Comprobaciones diarias
- Inspección visual de la EPA.
- Muñequeras.
- Comprobación de taloneras, punteras o calzado.
Comprobaciones mensuales
- Conexión a tierra de todas las superficies de trabajo.
- Sistemas de ionización.
Comprobaciones semestrales
- Comprobación general.
- Comprobación de campos electrostáticos – cargas.
- Señalización y etiquetas.
- Prendas no fungibles y fungibles.
- Calzado permanente
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